La teoría sueca del amor: ¿realmente queremos esto?
¿Estamos preparados para vivir en una sociedad en la que vivamos solos, muramos solos y por el camino nos aburramos hasta de nosotros mismos? Lee este artículo y dinos si te posicionas con la teoría sueca del amor o, por el contrario, piensas que es algo que debemos frenar.
En el documental titulado “La teoría sueca del amor”, el cineasta Erik Gandini nos lleva a recorrer el camino que el país escandinavo siguió para conseguir su ideal de independencia: despegarse de la antigua estructura familiar y buscar la independencia de uno mismo. Es decir, liberar a la mujer del hombre, a la gente mayor de sus hijos, a los adolescentes de sus padres, etc., para que los adultos pudieran sentirse autónomos y no dependientes.
Ellos mismos se preguntaban cómo iban a saber que dos personas estaban juntas voluntariamente si la mujer dependía del hombre, y así fue como empezaron a ver cada vez más lógico el hecho de perseguir esa independencia. Aun así, no se supo frenar a tiempo cuando se consiguió llegar hasta ella, pues aumentó considerablemente el número de mujeres que acudían a un banco de esperma para quedarse embarazadas sin necesidad de tener relaciones. Actualmente, uno de los mayores bancos de esperma del mundo afirma que son las danesas sus mejores clientas, y se preguntan “¿dónde quedará el papel del hombre en un futuro?”.
Erik Gandini también se centra en todas aquellas personas que, debido a esta situación, mueren solas, para hablar de las agencias que se ocupan de buscar a los familiares de los fallecidos que nadie reclama. Si eres independiente, si no tienes a nadie que te abrace cuando lloras o cuando tienes un problema, tampoco nadie te echará de menos después. Una de las trabajadoras de estas agencias afirma que “la soledad está en alza. El ansia de independencia nos ha deslumbrado”.
También existe una perspectiva opuesta, que es la de los refugiados que son acogidos en Suecia. Estos se preguntan dónde están los suecos, que no dejan conocerse en ninguno de los sentidos, a lo que una mujer sueca les explica varios puntos a tener en cuenta, como que les gustan las respuestas cortas, son muy puntuales, tienen distintas formas de afrontar una relación: pueden estar casados, ser pareja sin estarlo o estar juntos, pero viviendo separados y tardan unos siete años aproximadamente en encontrar trabajo e integrarse a la sociedad.
Por último, esta peculiar teoría nos habla de aquellos grupos que se han ido a vivir al bosque para encontrar la felicidad que en la civilización no tenían, pero también nos muestra la multitud de voluntarios que buscan a personas desaparecidas y los elevados índices de suicidios que se registran.
Ahora nos gustaría llegar al punto de reflexión, en el que desde Zhazz nos preguntamos, “¿realmente queremos esto?”, “¿estamos preparados para vivir en una sociedad en la que vivamos solos, muramos solos y por el camino nos aburramos hasta de nosotros mismos?”. Inconscientemente (o no), la sociedad va hacia este camino de independencia y soledad, dejando de lado las relaciones humanas, el contacto, la dependencia de personas cercanas que pueden aportarnos mucho más de lo que nosotros nos solemos imaginar. Pensando que estamos haciendo todo lo contrario, si adoptamos esta conducta nos estamos alejando de la palabra felicidad. Pero… ¿Por qué deshacernos de algo que nos conviene a todos?
Para resolver estas dudas, Zhazz ha organizado su primer evento bajo la premisa “Hola, individualismo. Adiós, amor” un encuentro en el que se proyectará el documental “La teoría sueca del amor”, dirigido por Erik Gandini para posteriormente abrir un debate juntamente con un piscolabis en el que pretendemos tratar el concepto de soledad en una sociedad claramente avanzada a nivel educativo y empresarial.
Apuntároslo bien, el domingo 14 de enero os esperamos en Casa Gracia (Passeig de Gràcia, 116) a las 17:00h. El aforo es limitado, así que corre a obtener tus entradas haciendo click aquí (añadir hipervínculo); recordamos, 9€ para aquellos que ya formen parte de la comunidad de Zhazz, y 13€ para aquellos que todavía se lo están pensando.
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