Woodstock 1969: 3 días de paz, amor y música
Un 15 de agosto de 1969 comenzaba en una granja de 240 hectáreas situada en Bethel (Nueva York), uno de los festivales más importantes de la historia de la música. Woodstock 1969 fue un festival que trascendió los límites de la música. Aún hoy, más de 40 años después de su celebración, es considerado por muchos como el mejor festival de la historia.
Hoy queremos acercarte este festival y hablarte de cómo se desarrolló y por qué fue tan importante.
Contexto histórico del festival Woodstock
Es imposible entender la importancia de Woodstock sin situarte en el marco histórico en el que se celebró. La década de los años 60 fue especialmente convulsa en Estados Unidos. Sucesos como los asesinatos de Robert Kennedy y Martin Luther King o la conocida como “Ofensiva del Tet”, una dura batalla librada en Vietnam, removieron los cimientos de la sociedad estadounidense.
Por otro lado, la década de los años 60 había visto el nacimiento del movimiento hippie. Este movimiento fue creciendo paulatinamente y, para mediados de la década, eran decenas de miles los jóvenes que pregonaban la paz y el amor libre.
El movimiento hippie estaba claramente en contra de la guerra y era normal que encabezara marchas a lo largo y ancho de Estados Unidos.
Con una sociedad profundamente dividida y con enormes problemas sociales, un grupo de veinteañeros decide organizar un festival con el fin de recaudar dinero para crear su propio estudio de grabación. No lo sabían, pero iban a hacer historia.
El cartel del festival Woodstock
El cartel del festival contó con la presencia de algunos de los mejores grupos y artistas del momento y también de la historia. Muchos de ellos los habrás oído en más de una ocasión.
Entre los grupos que participaron destacan: Santana, Neil Young, Janis Joplin, The Who, Jefferson Airplane, Creedence Clearwater Revival, Crosby, Stills, Nash & Young, Joe Cocker y, por supuesto, Jimi Hendrix, que cerró el concierto ya en la mañana del lunes 18.
Las previsiones de los organizadores se vieron desbordadas y 400.000 personas se congregaron en Woodstock. Muchos eran hippies provenientes de todo el país que aprovecharon el festival no solo para escuchar buena música, sino para protestar contra la guerra y para pregonar sus ideales: el pacifismo, el amor libre, el cuidado de la naturaleza y el amor por las artes.
Aunque las condiciones sanitarias debido a la masiva afluencia de público y a las tormentas no fueron las ideales, el festival se celebró en un ambiente festivo y se puede decir que fue el momento culminante del movimiento hippie. Aunque no todo el mundo estuvo de acuerdo.
El gobernador del estado de Nueva York en aquellos años, Nelson Rockefeller, declaró la granja de Bethel como zona catastrófica y el departamento médico tuvo que atender a casi 6.000 personas. Además, se registraron tres muertes, una de ellas por sobredosis.
A pesar de estos problemas, la revista Time calificó el festival como “el mayor evento pacífico de la historia”.
En cuanto al aspecto puramente musical se vivieron muchos momentos para el recuerdo. La interpretación de Joe Cocker de la canción de los Beatles “With A Little Help From My Friends” fue sin duda uno de los grandes hitos del festival. También destacó la actuación de Janis Joplin o la de Jimi Hendrix, considerada como el gran momento de la década de los años 60 según un crítico del periódico New York Post.
Sin duda los tres días de amor, paz y música que se vivieron en Woodstock cambiaron la historia de la música y se convirtieron en uno de los grandes acontecimientos del siglo XX.
No podemos cerrar el artículo sin recomendarte el documental ganador de un Óscar Woodstock: 3 days of peace & music.
Fuentes de información:
https://es.wikipedia.org/wiki/Martin_Luther_King